Nunca pienses que una persona es mala. No hay personas
malas en el mundo. Si alguien hace algo malo, lo hace por ignorancia, por falta
de consciencia o porque su mente ha sido lastimada. Así, pues, no juzgues mal a
nadie.
"El señor Krishna dijo: 'Na hi Kayana-krt kascid durgatim tata gacchati', (capítulo 6, verso 40). Quien transite el camino espiritual, indefectiblemente se elevará más y más".
Ninguna celebración está
completa si carece de espíritu de servicio. Debemos compartir con los demás
todo lo que recibamos de la Divinidad, pues en el dar, recibimos. En esto
radica la verdadera celebración. La felicidad y la sabiduría deben proliferar; eso
sucede cuando la gente se reúne en el Conocimiento.
Por lo general, te enojas gratuitamente y raramente
sonríes, como si la sonrisa fuera muy cara. En la ignorancia, el enojo es barato
y la sonrisa es cara. En el Conocimiento, la sonrisa es gratis como el sol, el
aire y el agua; y el enojo es extremadamente caro, como un diamante. En
conclusión: haz que tu sonrisa sea más barata y tu enojo, muy caro.
Los errores suceden todo el tiempo. Muchas veces te irritan y quieres corregirlos. ¿Cuánto podrás corregirlos? Para corregir los errores necesitas autoridad y amor. La autoridad y el amor parecen ser contrarios, pero en realidad no lo son. La autoridad sin amor es sofocante y no funciona. El amor sin autoridad es superficial. Un amigo necesita tener ambos, autoridad y amor, pero en las proporciones correctas. Esto puede suceder si estas totalmente desapasionado y centrado. Cuando das lugar a que sucedan los errores, puedes ser autoritario y dulce. Así es la Divinidad, el perfecto equilibrio entre ambos.
Todos sonríen cuando todo está bien. El verdadero logro es poder sonreír cuando las cosas salen mal. Si todo se desmorona y aun así sonríes, entonces eres un miembro de El Arte de Vivir. Te encuentras bien establecido en el Conocimiento.
El Aburrimiento es una bendición. Porque es cuando te aburres que avanzas, miras hacia delante, te vuelves un buscador y te elevas alto. Al mismo tiempo, el aburrimiento es también una maldición porque no te permite permanecer estable en un lugar; estable en tu ser, y tu mente sigue saltando de un lugar a otro sin rumbo alguno. Te aburres de todo y no puedes disfrutar nada. Sri Sri Ravi Shankar